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KOHLHAGE – Desde 1929
Desde fuera, la sede de KOHLHAGE de Neuenrade Küntrop tiene buen aspecto. Un edificio administrativo ultramoderno inaugurado en 2015 y cuyos 1.700 m2 ofrecen espacio suficiente para los próximos años: es lo primero que verá al acercarse a KOHLHAGE. Justo detrás se encuentra desde 2012 una nave en la que se fabrican soldaduras y otros conjuntos, en unidades de producción modulares y flexibles, de acuerdo con los criterios más modernos. El almacén de estanterías altas, aún mayor, con una nave logística contigua, no se inauguró oficialmente hasta 2020.
Así es hoy. ¿Y antaño? ¿Quién iba a pensar que cuando Ernst Kohlhage fundó una empresa de venta al por mayor de tornillos, tuercas y material eléctrico el 26.01.1929, sería un día el creador de un grupo de cuatro empresas con más de 200 empleados y una facturación de más de 42 millones de euros?
Los primeros años en la sede de «Hinter der Stadt 22» fueron tranquilos. Ernst Kohlhage construyó almacenes exteriores por toda Alemania, y a partir de 1944 se dedicó, además de al comercio, a la fabricación de piezas fundidas y forjadas. La empresa creció de forma lenta pero constante. Hasta 1950, año en que el fundador murió repentina y prematuramente a la edad de 59. Para colmo, el año anterior se produjo un caso de malversación de fondos por parte de un empleado, por lo que la facturación se redujo un 60%. Para los dos hijos gemelos Friedrich-Wilhelm y Ernst-Hermann, fue una época difícil. Friedrich-Wilhelm Kohlhage decidió entonces, con sólo 18 años, abandonar los estudios y continuar con el negocio. El hecho de que su hermano Ernst-Hermann tuviera la oportunidad de seguir estudiando y luego hacer una carrera sin precedentes con el proveedor de automóviles LUK es solo un dato secundario. Pero deja claro que la casualidad también interviene en el desarrollo de KOHLHAGE.
Bajo la dirección de Friedrich-Wilhelm Kohlhage, la empresa volvió a marchar y siguió evolucionando. En 1953 pudo hacerse cargo de un taller de tonelería y así ampliar considerablemente la cartera de producción y sus capacidades. Sin embargo, esto rápidamente dio lugar a problemas de espacio. El negocio se quedó pequeño. Por ello, el espacio de producción y oficinas se amplió en varias etapas hasta 1967. En 1974, Friedrich-Wilhelm Kohlhage adquirió una superficie de 22.000 m2 en Küntrop, un barrio de las afueras de Neuenrade. Mucho espacio que no utilizaría hasta 1979. Ese fue el año en que parte de la producción se trasladó a una nueva nave de 1.200 m2 en Küntrop.
Dos fechas son importantes para trazar la historia posterior de KOHLHAGE: ya en 1970, la empresa estableció sus primeros contactos en Extremo Oriente. En la actualidad es una empresa independiente, KOHLHAGE Taiwan, dirigida por un empleado natural de Kierspe (Alemania), que en 2007 decidió vivir en Taiwán y se trasladó allí con su familia.
El segundo año decisivo fue 1980, cuando se vendió y trasladó el taller de tonelería al norte de Italia. Esto permitió que la tecnología de soldadura pudiera ampliarse de forma significativa y rápida. Por supuesto, KOHLHAGE ya producía piezas soldadas desde los años 60. Pero ahora, y ese fue el gran salto en el desarrollo de la empresa, se podían producir conjuntos. El hecho de que se hayan ido ampliando y que KOHLHAGE produzca hoy conjuntos soldados de gran complejidad para la industria del automóvil es consecuencia de aquella decisión empresarial.
En 1986 KOHLHAGE se escindió. Este paso fue necesario porque el negocio comercial, que era el antiguo núcleo, y el área de producción se habían vuelto demasiado diferentes. KOHLHAGE Verbindungstechnik, como se llamaba la parte de fabricación de la empresa, se trasladó completamente a Küntrop con 70 empleados, mientras que KOHLHAGE GmbH permaneció en la antigua ubicación con 20 empleados.
Otro hito en la historia de la empresa fue la llegada del ingeniero industrial Michael Stock. En 1989 se convirtió en director general adjunto, y en 1997, tras la jubilación de Friedrich-Wilhelm Kohlhage, asumió la dirección única de la empresa. No obstante la familia Kohlhage siguió vinculada a la empresa, en particular a través de una participación del 49%.
Bajo la dirección de Michael Stock, la antigua sede también se disolvió en 1997 y se trasladó por completo a Küntrop. Posteriormente, la empresa experimentó un fuerte ascenso: en el año 2000 se introdujo la operación en tres turnos, se obtuvo la certificación UNE-EN ISO 9001 en 2003 y las certificaciones UNE ISO/TS 16949 e UNE-EN ISO 14001 en 2010, lo que permitió a la empresa cumplir incluso con los altísimos requisitos exigidos por la industria del automóvil. Por supuesto, Michael Stock no logró este crecimiento solo. Contó con buenos apoyos: Sven Lehecka (director de KOHLHAGE Verbindungstechnik) y Marc Schreiber (director de KOHLHAGE Befestigungstechnik) están a bordo desde 2007 y juntos los tres han seguido desarrollando y ampliando la empresa.
En 2010, Stock dejó la actividad operativa y cedió esta responsabilidad a los directores generales Lehecka y Schreiber. Hasta 2020 participó activamente en la empresa como accionista junto con la familia Kohlhage. A mediados de 2020, la familia Kohlhage se hizo con las acciones de la empresa, que desde entonces representa Maximilian Schreiber, nieto del Dr. Kohlhage.
¿Y después? Lehecka y Schreiber cambiaron el nombre de ambas empresas. Eso fue en 2012. A partir de entonces, se llamaron KOHLHAGE Automotive GmbH y KOHLHAGE Fasteners GmbH. Desde 2016, KOHLHAGE Automotive Tube (Kunshan) está presente en China y suministra a clientes de la región asiática. El edificio mencionado al principio también se construyó en los años siguientes a 2010. Por el momento, el último hito en el desarrollo de la empresa tradicional KOHLHAGE es la fundación de KOHLHAGE E-Tech en 2018. Esta nueva empresa de KOHLHAGE, los productos innovadores y una mano de obra eficiente han dado el primer gran paso en un campo de negocios que cambiará radicalmente en Europa y el resto del mundo en los próximos años. Hablamos de la electromovilidad y de las transformaciones que la acompañarán: para los empleados, para los clientes y también para nuestra empresa.
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